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El uruguayo Diego Godín, defensa del Atlético de Madrid, valoró hoy, tras la derrota frente al Valencia (1-2), que "partidos así se pierden uno de diez" y consideró como "buena noticia" la ratificación de Quique Sánchez Flores como entrenador del equipo por parte de la directiva del club rojiblanco.
"Tenemos que estar todos juntos ahora más que nunca. Hoy se vio el compromiso que hay. Partidos así se pierden uno de diez. Hoy Quique dio un mensaje de aliento, porque no nos merecimos llevar cero puntos en este partido", explicó el futbolista.
"Perder como perdimos hoy duele mucho más que cualquier partido. Hoy se jugó, se corrió muchísimo, se crearon ocasiones, tuvimos un penalti para ponernos en ventaja... Cuando haces todo eso y no te alcanza, no te puedes llevar ni siquiera un punto, quedas indignado", afirmó. "Si el esfuerzo que hicimos hoy no alcanza, habrá que poner un poco más a partir del lunes y trabajar el doble, porque esto se saca así nada más", continuó el defensa, que admitió que el vestuario está "mal" y que añadió: "Una derrota así duele de la forma que se dio. También nos podemos mirar a la cara e ir con la frente alta porque hoy dimos todo. Nadie se guardó nada".
También fue preguntado por cómo estaba su compañero y amigo Diego Forlán, que hoy falló un penalti. "Estaba muerto. El partido pasado en el Calderón lo pitaron, hoy vino con una actitud impresionante desde el primer minuto y hubiese sido un premio lindo para él, porque ha hecho un partido bastante bueno y completo", declaró.
"Estamos todos mal, él y todos por la situación, pero él es el primero que quiere dar la cara y sacar el equipo adelante. Entonces, estaba mal, pero hay que apoyarlo. Tenemos que apoyarnos entre todos, entre jugadores, dirigentes, técnicos y afición, porque esto lo sacamos todos o no salimos", añadió.
Por último, Godín, que fue expulsado en el minuto 86 del partido por un supuesto codazo a un rival en un salto a un balón aéreo, también habló de la actuación arbitral. "El arbitraje no me pareció de los mejores. Para mí dejó bastante que desear", dijo.
"Mi expulsión fue bastante exagerada. Yo vengo corriendo, salto, le pongo el antebrazo entre el hombro y el cuello, me apoyo, ni siquiera le doy en la cabeza, el jugador cae, pero no le suelto el codo ni mucho menos. Creo que fue demasiado castigo, se equivocó, se verá en los vídeos y a esperar a ver que resolución hace el club".
"Tenemos que estar todos juntos ahora más que nunca. Hoy se vio el compromiso que hay. Partidos así se pierden uno de diez. Hoy Quique dio un mensaje de aliento, porque no nos merecimos llevar cero puntos en este partido", explicó el futbolista.
"Perder como perdimos hoy duele mucho más que cualquier partido. Hoy se jugó, se corrió muchísimo, se crearon ocasiones, tuvimos un penalti para ponernos en ventaja... Cuando haces todo eso y no te alcanza, no te puedes llevar ni siquiera un punto, quedas indignado", afirmó. "Si el esfuerzo que hicimos hoy no alcanza, habrá que poner un poco más a partir del lunes y trabajar el doble, porque esto se saca así nada más", continuó el defensa, que admitió que el vestuario está "mal" y que añadió: "Una derrota así duele de la forma que se dio. También nos podemos mirar a la cara e ir con la frente alta porque hoy dimos todo. Nadie se guardó nada".
También fue preguntado por cómo estaba su compañero y amigo Diego Forlán, que hoy falló un penalti. "Estaba muerto. El partido pasado en el Calderón lo pitaron, hoy vino con una actitud impresionante desde el primer minuto y hubiese sido un premio lindo para él, porque ha hecho un partido bastante bueno y completo", declaró.
"Estamos todos mal, él y todos por la situación, pero él es el primero que quiere dar la cara y sacar el equipo adelante. Entonces, estaba mal, pero hay que apoyarlo. Tenemos que apoyarnos entre todos, entre jugadores, dirigentes, técnicos y afición, porque esto lo sacamos todos o no salimos", añadió.
Por último, Godín, que fue expulsado en el minuto 86 del partido por un supuesto codazo a un rival en un salto a un balón aéreo, también habló de la actuación arbitral. "El arbitraje no me pareció de los mejores. Para mí dejó bastante que desear", dijo.
"Mi expulsión fue bastante exagerada. Yo vengo corriendo, salto, le pongo el antebrazo entre el hombro y el cuello, me apoyo, ni siquiera le doy en la cabeza, el jugador cae, pero no le suelto el codo ni mucho menos. Creo que fue demasiado castigo, se equivocó, se verá en los vídeos y a esperar a ver que resolución hace el club".
